Se va terminando la pretemporada. Han sido
unas semanas intensas y duras pero muy útiles para el acoplamiento de un equipo
lleno de caras nuevas. El stage en Béjar además de para poner un buen tono
físico ha servido para unir a un grupo a priori desconocido.
El viento sopla a favor, los resultados
favorables y las sensaciones muy buenas. A ratos se mueve el balón con mucho
criterio y cuando hay que apretar los dientes para defender se hace con
intensidad y coraje. Han llegado buenos jugadores con trazas de futbolistas. Me
gusta. Claro, que todavía estamos en los diez minutos anteriores al pistoletazo
de salida. Cuidado con no fliparse. Sigamos con las orejas tiesas. Este juego
es muy caprichoso y cualquier circunstancia hace que el viento cambie de rumbo.
Será entonces cuando veamos si somos grupo y si somos futbolistas. Mientras
tanto disfrutemos del viento a favor.
Ilusionados saludos.
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